sábado, 8 de diciembre de 2012

Puro deseo...


Tengo ganas de todo:
de pasar mi mano húmeda
sobre la huella terrosa y manuscrita que dejaste,
de mirar para abajo y contar de a pares 
tus universos de orillas blancas.
Ganas de oírte cual río a lo lejos, 
y sentir como polvo tu voz en las entrañas.
De todo tengo ganas, 
de dibujar un catorce con mis dedos en tu espalda,
de tomar en un puño, la tierra colorada de tu vida.
Con éstas ganas,
quiero hacerle garabatos a tu sombra,
y morirme acribillada por las palabras simples de tu boca.
Deseo cansarme de tu blanco, de tu negro;  
y jugar a un instante de profundidad.
Porque las ganas son así,
hacen doler la razón cuando no te explican las opciones.
Me dan ganas de dividirte por todos lados,
de probar a pintarte con un pincel de tres cerdas,
o ignorarte opcionalmente como una gran cobarde.
Vos, una casa que no es mía;
pero en la que puedo dormir con las puertas abiertas...
si me dan ganas.

(Texto Propio)